Traicionado por los Dioses: la ira del Fantasma de Esparta.

Kratos era el implacable general de un gran ejercito espartano. Saqueaba con crueldad un pueblo tras otro, hasta que su ambición lo enfrentó a un inmenso ejército bárbaro. Al verse casi vencido, el general hizo un pacto con Ares, Dios de la Guerra: su alma a cambio de la victoria. Kratos salío vencendor, imbuido en una cólera destructiva aún mayor. Pero las deidades tenían otros planes para él… En mitad del frenesí, el espartano acaba matando accidentalmente a su propia mujer e hija. Traicionado por los Dioses, Kratos decide vengarse del Olimpo y cambiar así su destino… ¿Lo conseguirá?

A partir de esta noche, la marca de tan terrible acto será visible para todos. Las cenizas de tu mujer e hija permanecerán pegadas a tu piel, y nunca te las podrás quitar

– El Oráculo

Recuerdo jugar fascinado al primer God of War en la Playstation 2 durante el verano de 2005. Destacaba su propuesta fresca y novedosa enmarcada en la mitología clásica grecorromana. Mezclaba una narrativa épica, una banda sonora magistral y un diseño artístico impresionante con una jugabilidad frenética y muy violenta. Era la caña.

La fórmula se mantuvo y mejoró en subsiguientes entregas. Actualmente, la saga se extiende más allá de los cinco títulos, y Kratos ha hecho sus cameos en otros juegos y consolas. Para el 2013, con God of War: Ascension, yo ya estaba cansado por la repetición de elementos y la falta de innovación. Esperaba que el marketing del producto nos bombardease una vez más con las claves marca de la casa: bichos, acción salvaje, sangre.

Lo que NO esperaba era algo tan maravilloso como el spot publicitario “De las Cenizas”, dirigido por Karin Fong de Imaginary Forces para Sony Entertainment America y estrenado durante la SuperBowl de ese año:

Resurgiendo como el Ave Fénix

No quería jugar al juego. Quería volver a ver el anuncio. Una y otra vez. ¿Por qué? Cada toma, la duración de cada plano, cada decisión visual… era perfecta.

Hay que entenderlo de la siguiente manera: podían haber hecho lo de siempre, repetir una fórmula que ya funcionaba. Pero decidieron prescindir de lo superfluo y volver a las raíces: la historia del protagonista. El spot no sólo huye de lo sangriento, sino que hace gala de un buen gusto que puede resultar atractivo tanto para el que conoce la saga como para quien no sabe nada de ella.

Por primera vez veía a un Kratos de carne y hueso, en imagen real. Por primera vez desde hacía mucho tiempo me recordaban, de forma magistralmente concisa, el potencial dramático de su transformación. Y también, por primera vez en años, volvía a sentir empatía por un personaje a quien había seguido en todo ese proceso.

¿Cómo consiguieron acertar con todas estas premisas? Hoy analizamos las claves que hacen grande a este video de tan corta duración.

El planteamiento visual: la caída del guerrero.

Para poder analizar adecuadamente las decisiones relativas a encuadres y tiros de cámara, vamos a ayudarnos de una herramienta muy útil: la parrilla de planos. Esta parrilla refleja de forma condensada cómo se cuenta esta historia en imágenes.

Lo primero que destaca es que se trata de un video muy sensorial. Viento, tierra, cenizas, las briznas de hierba contra la piel… Son referencias visuales muy físicas que apelan a otros sentidos como el tacto o el olfato.

Por otro lado tenemos un juego interesante de cámaras lentas, aceleraciones y ralentizaciones de tiempo, para reforzar la idea de que nos movemos entre los recuerdos de la mente atormentada del protagonista. Los cambios temporales nos situan en un marco onírico de ensoñaciones y flashbacks, vinculados con el trasfondo del personaje.

Tenemos además varios planos detalle muy concretos. No sólo de la expresiva mirada de la niña y los ojos de Kratos, sino también del anillo de la mujer y el colgante de la hija. Creo que funcionan a un doble nivel. Por un lado, como guiño a los jugadores de anteriores entregas, que captan perfectamente su significado. Por otro, como “amuletos” o “talismanes” que, habiendo pertenecido a alguien que ya no está, remarcan esa noción de ausencia o pérdida.

Me gustan mucho los planos en los que la cámara sigue, tanto de forma cenital como lateral, a la hija entre la multitud de guerreros. Transmiten muy bien el concepto de pureza e inocencia, mientras vemos a una niña corriendo entre una masa de gigantes, con el único objetivo de trepar hasta su héroe, su padre, para una última despedida.

Pero en realidad, todo está ahí para que Kratos se desplome. Arriba y abajo: la cámara primero lo ha magnificado para ahora empequeñecerlo. La niña sube hasta lo alto de la ladera para que Kratos pueda caer a cámara lenta mientras su coraza se deshace. Ya no queda nada de ese gran ejército, ni de su pasado glorioso como general. Nosotros sentimos con él el peso de la culpa y su descenso a los infiernos.

Las referencias más claras podrían ser:

• Gladiator: por ese campo de trigo interminable, anterior a la pérdida familiar del protagonista.
• 300: por sus fieros guerreros inmersos en batallas épicas, muchas veces de “uno contra todos”. El color también recuerda mucho a esta película, como veremos a continuación.

Color: los recuerdos dorados.

Si estudiamos la parrilla de planos de arriba, no es difícil descubrir que el spot se mueve principalmente entre dos esquemas de color:

Los recuerdos gloriosos y familiares de Kratos usan una paleta de tonos cálidos, donde priman el azul del cielo y el dorado del campo. Los blancos y las altas luces llevan también bastante difusión, contaminando las zonas más oscuras, para dar esa sensación de vida idílica, de ensueño maravilloso.

Una idealización de la realidad que contrasta con el siguiente esquema de color, que comienza a actuar con la descomposición de la niña en cenizas y la llegada de tormenta en el cielo. La vida se ha desvanecido y ahora vemos unos tonos muy poco saturados, casi en escala de grises. La tierra es esteril, todo está yermo, muerto. Comienza el descenso a los infiernos del espartano, apoyado por unos efectos visuales de lujo.

VFX: polvo al polvo.

Entre los efectos visuales empleados nos encontramos con la popular técnica conocida como mattepainting, que consiste en “pintar” fondos para extender o variar las localizaciones reales o los sets* donde se ha filmado a los personajes.

También se ha clonado a los soldados. Inicialmente contaron con 9 figurantes, pero tras la multiplicación, el encuadre final muestra a un gran ejército desfilando en formación.

Aunque la técnica que me parece especialmente relevante y complicada en este caso es la simulación 3D de físicas. El equipo ha investigado y probado diferentes parámetros hasta dar con la combinación perfecta para simular de forma realista el peso, fragilidad y dispersión en el viento de partículas de ceniza. Tanto para las generadas desde los cuerpos de los actores, como las de los objetos fragmentados que colapsan contra el suelo.

Unas partículas que, en otro de los planos, acaban adheriéndose al brazo de Kratos y fijando así su transformación como Fantasma de Esparta. Un cambio más allá de lo visual, que requiere de un buen actor que interprete correctamente el trauma que supone para ese personaje.

Acting: dando vida a la familia perdida.

Brandon White es el actor que da vida al espartano. La dulce Isabella Marino es Caliope, su hija. Y Sarah Alami es Lysandra, la bella mujer de Kratos. Los tres actores tienen papeles concisos, lo que no les impide resultar expresivos y convincentes a la par que comedidos. Hubiese sido muy fácil caer en la exageración para mostrar la ira desmedida del protagonista, pero no ha sido así, y creo que es algo que juega a favor del tono general del video.

Rodar con niños es un proceso complicado, pero al parecer Isabella se portó bastante bien durante la grabación. Allan McKay, Supervisor de VFX, comentaba en una ponencia que fue divertido tomar fotos de referencia de la niña porque era algo inquieta y acababa posando como le daba la gana. Durante el rodaje en la localización hizo bastante viento, y también resulta gracioso ver como Sarah cobija a Isabella en una improvisada tienda de campaña. Seguro que se hicieron buenas amigas.

Además de la buena interpretación de Brandon, ayuda mucho su genial caracterización como Kratos a la hora de que el personaje resulte verosímil y podamos empatizar con él. Se ha tenido especial mimo en cuidar cada detalle, como por ejemplo la longitud de su perilla. Hay que tener en cuenta que los fans conocen su aspecto al milímetro, y por lo tanto su salto a imagen real era crucial. Aunque no todo entra por los ojos…

Música: las notas de la melancolía.

La música escogida para el spot es otro de los grandes aciertos de este video. La canción “Hanging On” de la artista Ellie Goulding encaja a las mil maravillas. No sólo por las sensaciones que transmite sino por cómo evoluciona de una a otra: dulzura, fragilidad, nostalgia, sentimiento de pérdida, dolor y fuerza.

El tema se engarza perfectamente en el ritmo de edición de la pieza, y cada golpe musical favorece el cambio de plano. Es una melodía muy onírica, que complementa la idea de tiempo contenido o sueño que se quiebra. Tiene además mucha presencia, ya que apenas hay efectos sonoros que convivan con ella, aparte de viento, pisadas, y truenos que suenan muy por debajo.

El estribillo dice algo así:

Sabes que podemos escaparnos / porque te estoy llamando / cada día siento este dolor / pero tú solo te giras y te marchas, no… / no puedo seguir aferrándome, a ti y a mi…

Funciona tan bien que, si tuviese que apostar, diría que ya tenían esta canción en mente cuando desarrollaron el concepto del video, en lugar de haberla buscado después. Aunque este dato no he podido corroborarlo.

Conclusión

Aún no he jugado a God of War: Ascension, pero suelo revisar este spot de vez en cuando. No deja de sorprenderme lo bien ejecutado que está, y cada vez que lo vuelvo a ver en busca de ideas o inspiración encuentro algún detalle nuevo.

Hay pocos videojuegos tan macarras y de acción tan frenética como la saga God of War. Por eso, atreverse con un spot de imagen real que apela y profundiza en la humanidad de su protagonista me parece una genialidad.

Espero que os haya gustado a vosotros también.

Referencias adicionales:

© 2016 Sony Interactive Entertainment America LLC. God of War es una marca registrada de Sony Interactive Entertainment America LLC. El spot publicitario así como las imágenes presentes en este artículo se emplean sin ánimo comercial y con fines educativos, a modo de referencia visual para un correcto análisis y bajo las directrices Fair Use under U.S. copyright law (Section 107 of the U.S. Copyright Act)